Con su medalla de plata Diego Ramírez fue el mejor mexicano en la XXIII Olimpiada Iberoamericana de Física de Mayagüez, Puerto Rico. También participó en la XII Olimpiada Internacional de Astronomía y Astrofísica en Shanghái, China.
Por Luis Salazar
Fotos: José Luis Macías
Creció escuchando a su primo hablar del oro absoluto que ganó en las Olimpiadas de Física hace 10 años. Tiempo después, ahora Diego es quien participó en dos importantes olimpiadas internacionales: una de física, y otra de astronomía y astrofísica. Ambas se celebraron en los últimos días del 2018.
Se llama Diego Ramírez y es estudiante de la Facultad de Ciencias Físico Matemáticas (FCFM), pero desde que estudiaba en la secundaria y luego en el Centro de Investigación y Desarrollo de Educación Bilingüe (CIDEB), participa en competencias municipales, estatales y nacionales. Solo faltaba ese pacito que implica usar su pasaporte.
Luego de ser de los mejores de San Nicolás y luego de Nuevo León, Diego concursó en la Olimpiada Nacional de Física y en la de Astronomía; en ambas fue de los mejores.
Varios filtros después, Diego se posicionó entre los mejores nueve estudiantes mexicanos en las dos ciencias y eso le dio el pase para participar del 20 al 28 de octubre en la Olimpiada Iberoamericana de Física en Mayagüez, Puerto Rico; y del 1 al 13 de noviembre en la Olimpiada Internacional de Astronomía y Astrofísica, en Shanghái, China.
“Desde chico me interesaba por las matemáticas, la ciencia. En preparatoria me fui enfocando en la física. Y creo que, en gran parte, fue por la simpleza, la elegancia que tiene la física como una forma de conocer el mundo”, dijo el estudiante de física.
“Un ejemplo de ello, y que siempre me ha gustado, son las ecuaciones de (James Clerck) Maxwell, que con cuatro ecuaciones muy cortas, caben en menos de un renglón, se puede describir por completo toda la teoría de electricidad y magnetismo”, agregó el medallista.
Con la medalla de plata que ganó en Puerto Rico, Diego fue el mejor estudiante de la delegación mexicana que estaba integrada por Ricardo Skewes de la Ciudad de México y Mateo Vélez de Guadalajara, quienes obtuvieron medallas de bronce; y por Uriel Velarde, de Baja California, quien obtuvo una mención honorífica.
“Estando (en Puerto Rico) allá me di cuenta que España, Brasil y Portugal tienen un nivel superior al de México. Y platicando con ellos, entendí que es por su entrenamiento, más extendido, a profundidad y más enfocado a este tipo de olimpiadas”, confesó.
Una semana después de la Olimpiada de Física en Puerto Rico, Diego regresó a México pero sin deshacer sus maletas, pues en pocos días viajó a la Olimpiada Internacional de Astronomía y Astrofísica en Shanghái, China, junto a otros estudiantes mexicanos.
“Nos pareció muy raro que se decidiera como cede Shangái, porque ahí la contaminación es muy grande. Cuando llegamos el cielo estaba completamente color naranja y lleno de contaminación; todos traían tapabocas, incluso los niños. Se nos hacía raro porque se necesita un cielo claro para observar el cielo”, describió Diego.
Muchos fueron los temas que los estudiantes abordaron en China, entre ellos la mecánica celeste, electromagnetismo, las físicas teórica, atómica y cuántica, la espectroscopía y la termodinámica, así como el concepto del tiempo, los exoplanetas, los sistemas solares binarios, las galaxias, entre otros temas.
“Pensamos que los chinos tendrían ventaja por estar en casa, pero el oro absoluto fue de un ruso. Y curiosamente también Irán, pero al parecer tienen mucho enfoque en las ciencias y llevan entrenamientos de meses para prepararse”, esgrimió.