Prefieren universitarios “maratonear” en sus tiempos libres
Valiéndose de encuestas y un grupo de enfoque, la doctora Elia Cornelio Marí analizó la práctica de “binge-watching” o “maratonear” de los universitarios, así como sus posibles efectos.
El repentino encierro por la pandemia de COVID-19 provocó que los estudiantes universitarios recluidos en sus casas recurrieran a buscar nuevas formas de pasar el tiempo libre, por lo que el uso de las plataformas de servicios de suscripción bajo demanda se convirtió en una alternativa popular.
Tan solo la plataforma Netflix, comentó la doctora Elia Cornelio Marí, obtuvo un total de 16 millones de clientes nuevos durante el primer trimestre del 2020, justo cuando inició el confinamiento.
Fue en su conferencia “Binge-watching: experiencias de estudiantes universitarios durante la pandemia”, dictada durante la Semana de la Comunicación de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la UANL, que la investigadora de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco dio a conocer sus conclusiones sobre el uso de estas plataformas de suscripción en los jóvenes y cómo este afecta su bienestar y desempeño académico.
La connotación negativa del término binge, que en inglés se utiliza para referirse a una actividad que se hace con exceso, como binge-eating (comer en exceso) o binge-drinking (tomar en exceso), que tienen como consecuencia el sedentarismo, el insomnio, el cansancio ocular, entre otros, fue lo que llevó a la experta a realizar su proyecto de investigación.
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Los jóvenes estudiados, quienes rondan entre los 18 y los 25 años, comentaron que, si bien sí son clientes de las plataformas de suscripción tipo Netflix, tienen en claro cómo consumir el contenido para no afectar sus obligaciones académicas, pues lo dejan para los fines de semana, horas libres o periodo vacacional.
Su investigación reveló que el 59.5% de los encuestados prefiere ver varios episodios a la vez, sin embargo, el 39.9% se limita a ver únicamente de 1 a 2 episodios, mientras que el 39.7% ve de 3 a 4, por lo tanto, no se habla de un consumo exagerado de contenido.
Además, entre los motivos por los cuales decidían ver varios episodios a la vez era para poder socializar con amigos, familia, ocupar el tiempo durante la pandemia o seguir a la par las tendencias de las redes sociales, inclusive, un 63.3% mencionó que le servía para salir de un periodo emocional difícil.
Para concluir, la doctora Cornelio dedicó una reflexión de por qué es importante realizar investigaciones sobre el fenómeno del binge-watching.
“Hay que recordar que las prácticas de visión están en constante cambio y que como investigadores de la comunicación pues nos toca describirlas en este momento”, comentó la doctora.
Por: Fabiola Capetillo Fotografía: Roberto Rodríguez