Crisálida o la entomología de la mujer
Miralda Marlen escribe sobre la transmutación de la mujer visualizada en un cuerpo de insecto, en esa edad de juventud cuando se vive con miedos, preocupaciones y dilemas de la vida en Entomología de la mujer, UANL, 2025.
“Cuando te leo, tus poemas me duelen”, le decía un compañero a Miralda Marlen en el Centro de Creación Literaria en la Casa Universitaria del Libro, de la UANL. Hoy, los poemas que desarrolló durante la beca literaria dejaron el capullo en Entomología de la mujer (UANL).
El poemario se presentará el 12 de octubre en la Feria Internacional del Libro de Monterrey, en el Stand UANL.
Entomología… comenzó como un proyecto pandémico en pleno Covid-19, cuando el profesor Eliseo Carranza sugirió apretar el zurcido de los versos de Miralda. Carranza exigía que antes de escribir se tenía que investigar primero.

En la facultad todavía era una adolescente. Empecé este libro siendo una adolescente. Mi pensamiento, referencias y pensamientos eran otros. Siempre he tenido preocupaciones bastante filosóficas.
“Llevábamos dos años del taller con el maestro Eliseo y llegó la pandemia. Él nos ponía ejercicios con temática o que se integraran tales elementos poéticos. Yo siempre tenía mis ejercicios, pero ya cuando nos solicitó apuntar hacia un tipo de proyecto que compartiera una misma temática, me puse a buscar.
“Lo hice de manera inconsciente. Escribí uno sobre las polillas, luego de las hormigas, otro de escorpiones, arañas. Excluí poemas que no iban hacia ese ritmo narrativo, descubrí una línea que tenía que ver los insectos y de ahí salió”, detalló la también ganadora del 1er. lugar del Certamen de Literatura Joven Universitaria.
La poeta Carolina Olguín acompañó a la generación 2022 del Centro de Creación Literaria de la UANL. Su visión crítica solicitó a Miralda hacer una limpia del texto, que tuvo como resultado Entomología de la mujer.
“En ese momento ya tenía nombre. Expliqué en ese momento la transmutación de la mujer en un cuerpo de insecto, que era esta visualización de cuando uno está en esa edad tiene miedos, preocupaciones, dilemas.
Elementos grotescos, violentos, viscerales, Miralda deseaba disrumpir a través de su poesía. Ser caótica, el propósito. El desorden como intención. Cree haberlo conseguido en Entomología... con el hartazgo.
“Una constante búsqueda de mi parte por salir de ese caparazón y enfrentar todo lo que en ese momento internalizaba o callaba. Pero yo quería nombrarlo.
“En el Centro empecé con un poema, uno de los más extensos de este libro. Lo lee la maestra Carolina Olguín y me dice que le gusta mucho el poema, pero solicitó limpiarlo profundamente. Su lectura de mi obra fue determinante para el resultado final de Entomología”, comentó Pedraza Cantú.

“Creo que hasta cierto punto delata un hartazgo. Así que tal vez un impacto, me encantaría que hubiera impacto, una sensibilidad, en parte una rabia, melancolía. Son emociones un tanto no positivas, pero generan un impacto.
“Tengo presente a un compañero de la generación que me decía que cuando me leía, le dolía. Ese es mi propósito, quiero que duela, incomode. Para mí el arte debe incomodar”, aseveró.
Su historia con la literatura
La abuela de Miralda escuchó este nombre en Candela, Coahuila, y así nombró a su madre. De familia con raíces tamaulipecas y zacatecanas, Pedraza Cantú estudió en la Facultad de Filosofía y Letras la licenciatura en Letras Hispánicas.
Cuando estudiaba la secundaria, una profesora los obligó a asistir a la Feria del Libro y comprar un libro. Un nuevo desafío, de Cathy Hopkins, fue el resultado de esa aventura. Su inicio con la literatura, que comenzó con princesas y fantasía, se gestaba. El acercamiento personal de la poeta fue wattpad.com.
“Desde la preparatoria fue aterrizando el amor a la literatura. El hecho que la maestra me obligara a comprar un libro me molestó en su momento, pero con el paso del tiempo desencadenó una serie de actitudes.
“Cuando no tenía dinero para comprar libros, wattpad me servía mucho. Me gustan mucho los libros de ciencia ficción. Ya en la adolescencia me propuse a conseguir los 10 libros que tienes que leer antes de morir.
“La experiencia con Cien años de soledad fue leerlo con diccionario. En la facultad me atreví a entrarle a la Divina Comedia, por la asignatura de Textos Renacentistas”, explicó la autora en entrevista.
Miralda no fue aceptada en el primer intento a la FFYL. Eso la llevó a prepararse de manera autodidacta durante todo un semestre. En el segundo intento, estaba dentro. Feliz de ser parte de la comunidad de los Unicornios, compartió clases con alrededor de otros 14 compañeros.
“Yo quería estudiar Criminología. Curiosidad, pero también abogada por el hecho de la justicia, que siempre me impactó mucho, pero me di cuenta de que no tenía las actitudes para eso.
“Me di cuenta de mi gusto por la literatura. Tuve una maestra con la que empecé a tomar asesorías para la licenciatura que me motivó. Nos ponía a leer poemas de Pablo Neruda, Mario Benedetti”, indicó.
Pedraza Cantú aún cuenta con algunos poemas dispersos en su Google Drive, que le gustaría trabajar a profundidad. Su interés en este momento es la herbolaria y botánica.
Por: Guillermo Jaramillo Fotografía: Efraín Aldama