Desarrollan compuesto contra el herpes en laboratorio de UANL
El compuesto de riolozatriona que actúa como agente antiherpético se obtiene en el Laboratorio de Resonancia Magnética Nuclear de la Facultad de Medicina de la UANL.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Salud, en México, el 80% de la población mayor de 12 años está infectada con el virus del herpes simple 1 y, cada año, más de 4 mil personas se infectan de herpes genital.
Hasta el momento no existe una vacuna para tratar esta enfermedad, pero la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) ya trabaja en contrarrestar los síntomas a través de una investigación encabezada por Verónica Mayela Rivas Galindo, responsable del Laboratorio de Resonancia Magnética Nuclear de la Facultad de Medicina de la UANL.
El proyecto, que inició en 2010, consiste en obtener de la planta jatropha dioica, conocida en México como sangre de drago, compuestos de tipo diterpenoide, específicamente riolozatriona, que se obtienen de la raíz de la planta, para elaborar una formulación que pueda usarse como agente antiherpético. De este trabajo ya se obtuvo la patente para uso exclusivo de la UANL.
La raíz de esta planta ha sido utilizada desde tiempos prehistóricos para infecciones bucales. La utilizaban los aztecas para tratar esos problemas. Con estos antecedentes iniciamos un proyecto para obtener compuestos con la actividad antiherpética. Procesamos la raíz, la sometemos a procesos de extracción y separación, hasta obtener un compuesto puro. Determinamos su estructura química y en los análisis confirmamos que tenía actividad antiherpética”.
Rivas Galindo, cuya línea de investigación son los análisis estructurales de productos naturales, detalló que, al determinar que se tenía esa actividad, comenzaron a hacer formulaciones a base de vaselina de este compuesto (riolozatriona), las cuales se aplicaron a ratones que tenían infección inducida por herpes y la resolución de la infección resultó equiparable al uso del fármaco aciclovir a una concentración casi 10 veces menor.
“Esto es un muy buen indicio porque la formulación de nosotros contiene 0.3 % de riolozatriona, comparado con el 2.5% de aciclovir y el efecto fue el mismo. Ahora estamos encaminados a investigar el mecanismo de acción que tiene este compuesto para combatir el herpes”, manifestó la profesora titular de la Facultad de Medicina.
Buscan acabar con la enfermedad
La investigadora afirmó que se busca que la formulación sirva para las infecciones bucales y sexuales provocadas por herpes y agregó que, aunque las infecciones por este virus no tienen cura hasta el momento ya una vez que se instala en el cuerpo humano ataca el sistema nervioso, puede “tranquilizarse”. Sin embargo, una vez que se bajan las defensas se reactiva con mayor fuerza provocando daños en el cerebro e incluso la muerte.
Es un problema bastante fuerte porque los antivirales no matan al virus, no lo eliminan del cuerpo. Nosotros lo que queremos es ver si este compuesto realmente actúa con un mecanismo de acción diferente al del aciclovir, de tal manera que sí lo elimine".
Sobre la patente, la investigadora de la Facultad de Medicina informó que una vez que supieron de la actividad antiherpética del compuesto puro, sin estar en formulación, se sometió a patente en 2013 y fue hasta 2019 que la recibieron.
Desde entonces, la UANL tiene protegido este compuesto de riolozatriona contra el herpes, además de patentar la formulación de este compuesto para los padecimientos dérmicos de esta enfermedad.
La investigadora añadió que el trabajo se encuentra en estudios de fase preclínica, desde donde escalará a especies animales más grandes infectadas, antes de probarlo en humanos.
Esta patente es muy importante, puesto que es una formulación muy sencilla, muy fácil de hacer y obtener. Es muy poca cantidad, menos del 1% que trae de riolozatriona, por eso necesitábamos protegerla inmediatamente, porque es fácil de hacer y estamos en proceso de otra patente muy interesante y con buenos resultados”.
- Te puede interesar: Enfrenta vitiligo mitos que rodean a la enfermedad
Por: Norberto Coronado Fotografía: Patricia Rosales