Urge proteger los bosques
En la conferencia “La condición global de los bosques”, impartida por César Cantú Ayala, transmitida en las redes de UANL Sustentable de la Universidad Autónoma de Nuevo León, se advirtió de la gran importancia que tienen estos ecosistemas para la población mundial.
En Nuevo León no se cuenta con el porcentaje de áreas forestales establecido en los estándares mundiales. Esto contribuye a una muerte silenciosa y un estilo de vida peligroso debido a la naturaleza industrial de la zona.
En la conferencia “La condición global de los bosques”, impartida por César Cantú Ayala a través de las redes de UANL Sustentable de la Universidad Autónoma de Nuevo León, se advirtió de la gran importancia que tienen estos ecosistemas para la población mundial.
“La ciudad de Monterrey tiene mil km2 de mancha urbana. Concentra el 30 por ciento de la superficie de las áreas protegidas del Estado en la zona periférica en los 11 municipios que constituyen el área metropolitana.
De las 560 mil hectáreas de áreas protegidas del Estado, representan apenas el nueve por ciento del territorio del Estado. Tenemos un déficit de la mitad. Se requiere decretar 520 mil hectáreas extras para llegar al 17 por ciento que estableció como meta el Panel de la Convención de la Biodiversidad, en Japón en 2012”.
Los bosques son de gran importancia desde el punto de vista ambiental porque estos ecosistemas son actores claves en lo que se refiere a servicios ambientales.
Junto con el suelo, son los principales reservorios de carbono, regulan los flujos de agua, ayudan al mantenimiento de las condiciones climáticas, evitan la erosión de los suelos, además de otorgar una gran cantidad de productos como la madera, los frutos, plantas medicinales, por mencionar algunos.
Cantú Ayala es biólogo por la Facultad de Ciencias Biológicas de la UANL y Doctor en Zoología por la Facultad de Recursos Naturales de Viena, Austria. Es profesor de tiempo completo en la Facultad de Ciencias Forestales de la UANL, impartiendo las cátedras de Gestión de Áreas Naturales Protegidas, Conservación de la Biodiversidad, Evaluación del Impacto Ambiental. Además, es Investigador del Nivel 1 del Conacyt.
Preocupa crecimiento de la población
La vegetación contribuye a la captación y reducción de los contaminantes. En una ciudad como Monterrey tan industrializada y un clima seco, árido y semiárido es vital contar con áreas forestales.
En palabras de Cantú Ayala, el tema de su conferencia surge a raíz de un reporte que recién presentó la Food and Agriculture Organization of the United Nations (FAO) sobre la evaluación global de los recursos forestales.
“Tiene datos muy interesantes acerca del valor de estos bosques. La definición de bosque ha sufrido cambios a lo largo del tiempo. La tierra en 510 millones de kilómetros cuadrados, el 29 por ciento son de superficie emergida continental, y el 71 por ciento son océanos”, informó.
En 2020, vivimos siete mil 790 millones de habitantes. Cantú Ayala señaló que a cada habitante de la tierra le corresponden en promedio dos hectáreas; es decir, el equivalente a dos campos de futbol soccer.
Según los estudios de la FAO, para el 2050 la población pasará de siete mil 600 personas a 10 millones, por lo que la demanda mundial de alimentos crecerá un 50 por ciento durante este periodo.
“La FAO anualmente evalúa el estado actual de los bosques. En el 2018 hicieron una proyección sobre el crecimiento poblacional. Hay una presión creciente sobre la naturaleza para satisfacer las necesidades de una población que no cede en su crecimiento”, apuntó Cantú Ayala.
Los bosques a nivel mundial representan un dos por ciento del PIB. En México, es del uno por ciento. Rusia, Brasil, Canadá, Estados Unidos y China se dividen la mayor concentración de áreas forestales en el mundo.
- Lee también: Clubes ecológicos promueven conciencia ambiental
Ganadería amenaza ecosistemas
El experto indicó la importancia de atender la deforestación mundial, pues hay diversos factores que la condicionan.
“Desde el primer informe, de 1990 al 2000, disminuyó un 7.8 por ciento el número de hectáreas. Del 2000 al 2010, disminuyó en un 5.2 por ciento. En lo últimos 20 años, ha habido una disminución de 4.7 por ciento.
“Hay una tendencia en la reducción de la pérdida, que generalmente lo ocasiona la deforestación de áreas forestales para ampliar la frontera, sobre todo pecuaria; es decir, generar áreas de pastizales inducidos como la cría de ganado y los incendios que ahora están afectando con veranos inusuales en la Siberia, que ha ocasionado incendios en esa zona”, apuntó Cantú Ayala.
La mayor pérdida de áreas forestales se da en África y Sudamérica. En el caso de México, contenido en América del Norte y Centroamérica, ha habido una pérdida de 100 hectáreas por año.
“Necesitamos bajarle al consumo de carne”
Cantú Ayala señaló que la pauta es hacer un cambio en el proceso de producción, por ejemplo de la industria cárnica.
“Hay que cambiar las pautas de desarrollo en una forma más armoniosa. La ganadería, el consumo de carne a nivel global provoca una pérdida por el cambio de uso de suelo. A su vez, contribuyen al cambio climático porque generan metano.
Habría que cambiar la pauta de la producción para reducir la presión sobre los ecosistemas, eliminar cada vez más el ganado y contribuir para la reforestación de los ecosistemas".
“Por ahí hay una tendencia de generar carne in vitro. Esperemos que este procedimiento funcione. La pauta más importante es que todos le bajemos al consumo de la carne”, apuntó Cantú Ayala, quien desde hace algunos años es vegetariano y recomendó al público asistente a la conferencia plantearse esa posibilidad en la dieta.
- No te pierdas de: Peligra una cuarta parte de la biodiversidad mundial
Por: Guillermo Jaramillo