Viven pantomima y performance en la UANL
La UANL fue sede del Séptimo Festival de Pantomima en Monterrey. Fue un foro donde se disfrutó del buen humor, comedia y performance. Cristian Molina, de Chile, presentó un performance sobre la guerra.
Con el objetivo de impulsar el movimiento de la pantomima, se llevó a cabo el Séptimo Festival de Pantomima en el Colegio Civil Centro Cultural Universitario de la UANL del 23 al 25 de agosto.
Es un encuentro donde también empezamos a gestar nuevos proyectos para tratar de conectar toda las ciudades de México".
“Para que el público sepa que el arte del mimo está muy desarrollado”, expresó González, mejor conocido como el mimo Joy.
El Festival de Pantomima se celebra cada año desde 2013, organizado por la compañía Ñaca ñaca, fundada desde hace 10 años por el mimo Joy.
En dicha compañía, participan actores, diseñadores, mimos, bailarines, ilustradores, payasos y artistas que realizan diversos proyectos.
El Festival de Pantomima se celebra cada año desde 2013, organizado por la compañía Ñaca ñaca, fundada desde hace 10 años por el mimo Joy.
“Estamos tratando de proponer un fideicomiso para que hayan empresas que nos apoyen, no solo a nosotros sino que apoyen proyectos artísticos de la ciudad”, explicó el mimo Joy.
Mimos y performance de talla internacional
Entre risas del público y alegres mimos, el Aula Magna del Colegio Civil se llenó de comedia con invitados de todo México y parte de Latinoamérica.
Entre ellos, el chileno Cristian Molina, quien compartió un espectáculo y performance de la guerra, así como una presentación estelar en el segundo día.
Ramón Solano, reconocido mimo de la Ciudad de México, no dejaba de hacer reír al público y que disfrutaran del buen humor.
El mimo capitalino presentó un show que despertó la imaginación gracias a su ingenio, ya que viajó en una motocicleta, acompañado de un perro hecho de calcetines.
Por parte de los performances, Dinamo Ritmo de Monterrey demostró que, a través de la expresión corporal, se puede ir en un vaivén de sentimientos, entre el miedo y el deleite, con el baile y el uso de máscaras tétricas.
Grupo Espejos, de Ciudad Victoria, demostró que la familia unida puede llevar un poco de felicidad a las personas.
El elenco estaba integrado por el padre, madre e hijas, quienes participaron con actos cómicos e interpretaciones de chefs, perros y chicles que quedan pegados en el zapato.
Durante el festival, también se aprendió de la mímica, gracias a la master class gratuita que ofrecieron Ramón Solano, Rafael Perera de Ciudad Victoria, y Héctor Gómez de Sonora.
Por: Roxana Galindo Fotografía: Perla Vázquez